Nayito en el Hospital!

Al final después del subidón A Rio, va y se tuerce el día, cuando estaba mirando los billetes de IBERIA, tumbado en el sofá, se acerca Nayito, el protagonista de estos días, maullando, buscando mimos. Levanto la mano, sin desviar la mirada de la pantalla, y al acariciarl, noto que tiene el cuello húmedo. Fijo mis ojos en él, para regañarle otra vez, por entrar en casa hecho un guarro cuando.... Joder! , Mierda! Le ha mordido un animal!.... no, no... otro gato, una rata... le miro la herida y es profunda, del tamaño de una moneda, pero no sangra, a carne viva, para tres puntos mínimo.... Corre al hospital, que atendidos de urgencia, me tranquilizan con - Parece un quiste de pelo que ha reventado, posiblemente se habrá rasgado con algo o..... le puede...... haber mordido otro gato y reventarse -, para no hacerme quedar peor después de mi escena dramática de que le habían atacado tres fieros leones... En fin, que se lo han quedado en el Hospital. para operarlo, coserlo y pasar una noche de yonqui y mañana vuelvo a recogerle. A la vuelta a casa, que son viente minutos en coche, atravesando el Parque Natural,  sin un alma en la carretera, sólo tú y la máquina, bordeando sin prisas, las cien curvas para llegar al pueblo. Y en esas, pienso, que cuando he ido al Hospital, con los gritos de Nayito a cada curva, el corazón a cien por hora y su equivalente en el automóvil, pensando cosas como - que no se muera, por Dios - , - Tenía que pasar-, -no hay que dejarle salir de noche-, esos pensamientos que te presionan a actuar, a moverte rápido... y ahora la carretera es sinuosa, suave, sin sobresaltos, todo está bajo control y las nubes grises se van en retirada. Somos Aire puro!